Desde luego, todos conocen la historia: un jóven y todavía desconocido Tim Burton, es contratado en 1982 por Walt Disney en calidad de aprendiz y realiza este corto, literalmente corto (sólo 6 minutos), en donde concentra el estilo y los temas que luego desarrollará en sus películas. Para sus seguidores este trabajo, que resulta biográfico, rinde homenaje a Vincent Price (que narra la historia) y a Edgar Allan Poe, de quien toma una métrica parecida.
Etiquetas: Animaciones, EEUU, Historia del cine animado
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